El proyecto que recibe esta ayuda se encarga de ayudar a personas con problemas de drogadicción

Cáritas Diocesana de Ciudad Real ha recibido el apoyo de la Fundación Unicaja para contribuir al desarrollo del proyecto de encuentro y acogida de personas drogodependientes que se lleva a cabo en el Centro Siloé. Se trata de un programa de intervención terapéutico-educativa dirigido a personas que cuentan con escasos recursos económicos y socioculturales. Para ello, se inicia proceso de recuperación, teniendo siempre la persona en el centro. Esto significa que se trabaja de forma coordinada con el participante evolucionando al ritmo que la persona va marcando.

El secretario general, Ángel Ruiz Moyano ha acompañado al representante de la Fundación Unicaja, Francisco Cañadas, a visitar el centro dónde se realiza las intervenciones y se dispensa la medicación a los participantes. Al mismo tiempo han firmado el convenio de colaboración que vincula a ambas instituciones como colaboradoras.

El acompañamiento, clave para la recuperación personal

El proyecto de encuentro y acogida ‘Siloé’ está dirigido a personas con problemas de drogodependencia en situación de consumo activo, prioritariamente a aquellas que disponen de escasos recursos económicos y socioculturales, sin apoyo familiar o muy deficiente, alejadas de la red sanitaria, con asuntos judiciales pendientes, y malas condiciones de salud. El programa también atiende a personas que han pasado del consumo a cualquier ejercicio terapéutico pero no disponen del acompañamiento suficiente, a usuarios de un programa de mantenimiento con metadona, a internos de los centros penitenciarios de Alcázar de San Juan y Herrera de la Mancha, y a jóvenes en situación de riesgo de consumo.

‘Siloé’ cuenta con un centro de encuentro y acogida en el que se realiza la intervención educativa del programa y se coordinan todas sus líneas de actuación. En él se diseñan los planes de acompañamiento de los usuarios, se establecen pautas sencillas de prevención, se asegura la adhesión a los tratamientos médicos necesarios, y se atienden situaciones de crisis, entre otras acciones.

La educación en la calle también es un pilar importante de ‘Siloé’, ya que en ella los agentes que trabajan en el proyecto ponen en práctica estrategias de acercamiento que suponen un primer paso para la terapia posterior. Además, como complemento al centro diurno de encuentro, Cáritas Diocesana cuenta con una casa tutelada para la atención de personas sin hogar que avanzan en sus procesos de recuperación.

Para desarrollar este programa que cuenta con la colaboración de la Fundación Unicaja, Cáritas Diocesana se coordina con otras entidades como la Unidad de Conductas Adictivas de Ciudad Real, y los centros sociales y sanitarios.