Cáritas Regional de Castilla-La Mancha se propone acompañar a 575 familias productoras de la diócesis de Kinkala, en la República del Congo, en la mejora de la productividad agrícola
Desde el mes de enero esta Cáritas está trabajando en las 5 provincias de nuestra Región para recaudar 38.000 € para la adquisición de un tractor que facilite las tareas de las familias de la zona
Cáritas en Castilla-La Mancha, en su empeño por la defensa de los derechos a todas las personas, no deja de trabajar contra la pobreza ya sea en su territorio o fuera de sus fronteras, de hecho en 2022, datos de la última memoria, la ayuda de Cáritas en CastillaLa Mancha, llegó a 19.887 personas de otros países.
Las actuaciones en materia de cooperación internacional se fundamentan en la necesidad de que la caridad está abierta a una preocupación universal. Nuevos retos que confrontan nuestro proyecto de universalidad nos obligan a articular nuevas respuestas.
En estas nuevas respuestas, Cáritas Regional de Castilla-La Mancha, lleva trabajando desde mediados de este mes de enero en un proyecto para la adquisición de un tractor para la Diócesis de Kinkala, en la República del Congo, que favorecerá a 575 familias de toda la zona.
Desde Cáritas Regional de Castilla-La Mancha, se ha iniciado todo un proyecto que quiere conseguir por una parte, hacer visible la situación de vulnerabilidad de las personas que viven en la diócesis de Kinkala y que dependen de una agricultura muy rudimentaria y por otra parte, la captación de fondos para el proyecto de la adquisición del tractor, que es una de nuestras metas, conseguir 38.000€ para que la comunidades de Kinkala puedan adquirir ese tractor.
Hoy en día el mundo rural busca reformarse mediante la organización de los productores para introducir la mecanización de la agricultura, algo que resulta indispensable para el desarrollo de comunidades en estas zonas. Desde el fin del último conflicto en 2016, la recuperación agraria, base económica de la zona, está siendo muy deficiente por falta de
voluntad y abandono de las autoridades. En 2022 el país ha sufrido una grave inflación del precio de los alimentos debido a la débil producción agrícola y la consiguiente dependencia de la importación de los alimentos. La mejora de los sistemas productivos agrícolas y su modernización, son fundamentales por tanto y animaría a la juventud para terminar sus estudios, que, por falta de empleo, recurren a la agricultura con la esperanza de tener el equipo adecuado para un mejor rendimiento.
Muchas actividades se desarrollarán en diferentes puntos de nuestra región con el fin de acercar la realidad de Kinkala a nuestras vidas, para conocer su situación, para conseguir esos fondos necesarios para la compra del tractor, desde celebraciones, difusión en redes sociales, eventos públicos como exposiciones, charlas, mesas de información, rifas y sorteos, etc. Acciones que desarrollarán los equipos de voluntarios en cada una de sus Cáritas Parroquiales en todo el territoriio de Castilla-La Mancha y hasta el día 15 de marzo, que es el tiempo que nos hemos dado para poder recaudar la cantidad indicada anteriormente.
Experiencias como esta, ya se realizaron durante la época de pandemia con un proyecto de ayuda humanitaria con Yurimaguas en Perú, donde los voluntarios de Cáritas en Castilla-La Mancha, se movilizaron para poder llegar a recaudar lo que se nos solicitaba desde Cáritas en Yurimaguas para paliar las necesidades más básicas y poder hacer frente
a la pandemia.
Desde esta líneas, animamos a toda la ciudadanía que quiera apoyar con la compra del tractor en Kinkala a participar colaborando con su Cáritas más cercana y preguntando dónde puede realizar su donativo y cómo hacerlo.