Área de parroquias
La función del Área de Parroquias es trabajar por un desarrollo incluyente, que garantice las plenas condiciones para el ejercicio de la dignidad humana. Por ello se llevan a cabo diversos programas como Acogida y acompañamiento a Familias, Comunidad Gitana…
Nuestra acción incide en las personas, en las comunidades y en las estructuras y procesos sociales y apuesta por la transformación integral de todas las dimensiones.
Nuestra función es trabajar por un desarrollo incluyente que garantice las plenas condiciones para el ejercicio de la dignidad humana, de cada uno de sus derechos y de su participación.
Los ejes que fundamentan la acción en el Área de Parroquias son:
Cáritas está convocada a animar y participar activamente en cuantas iniciativas de solidaridad justa surjan en la Iglesia y en la sociedad. Por dos motivos, porque en nombre de la comunidad cristiana desarrolla el ministerio de la caridad y porque este servicio visibiliza buena parte del amor efectivo de toda la comunidad cristiana hacia los pobres.
Cáritas tienen un papel relevante para lograr que la comunidad reflexione sobre las implicaciones que conlleva el ejercicio de la caridad y combinar el conocimiento crítico de la realidad, técnicas de intervención social y el cultivo de un talante personal y comunitario entrañablemente solidario.
Cáritas debe impulsar y colaborar, de acuerdo con su propia identidad, en cuantas iniciativas se promuevan en la Iglesia y en la sociedad al servicio de los pobres.
La coordinación en sus diversos niveles es condición necesaria para actuar eficazmente frente a la complejidad y dimensiones de la pobreza.
Cáritas debe movilizar la comunidad en la perspectiva de compartir fraternalmente los bienes de todo tipo, y no sólo económicos. La comunión de bienes es expresión de la comunidad eclesial.
Es inherente a la propia acción de Cáritas. Según el modelo confederal, es necesario que la caridad esté abierta a una preocupación universal.